Este equipo, llamado Grupo de Métodos Numéricos en Mecánica Computacional, intenta poder estimar cómo es el comportamiento de un tanque o silo y desarrollar mejores técnicas de análisis que permitan predecir cuándo se van a producir fallas bajo efectos del viento, terremoto o succión interna. Está dirigido por el Dr. Luis Godoy, quien es profesor titular del Departamento de Estructuras e investigador principal del CONICET, y se completa con los doctores Carlos Prato, codirector del grupo, y Fernando Flores. A estos se le suman un grupo de 8 becarios graduados, algunos estudiantes que realizan sus tesis, y el Dr. Tomás Prato.
Para el trabajo, los investigadores del equipo realizaron un trabajo de campo que incluyó viajes a distintos puntos de la provincia, para conocer las fallas de los silos y entrevistar a los acopiadores para conocer sus problemas. Por otra parte, se contactaron con distintas plantas de Estados Unidos y el Caribe, para conocer los problemas que han tenido. De esta forma, construyeron un escenario con distintas situaciones posibles y esencialmente el trabajo del grupo consiste en desarrollar por computadora modelos que simulan el comportamiento estructural de tanques y silos.

Distinción
Por su trayectoria como investigador, el Dr. Godoy recibió en septiembre pasado el premio 2002 de la Academia Nacional de Ciencias Exactas, Físcas y Naturales, en el rubro de Ingeniería Estructural. Al respecto, el docente expresó: "Es una satisfacción muy grande, he recibido algunos premios en el exterior, pero en la Argentina es la primera vez que me dan una distinción fuera de la Universidad. Es muy emocionante, y creo que también lo es para la gente que trabaja conmigo, becarios e investigadores, porque también significa un reconocimiento a todo el grupo que me acompaña."
Este grupo de investigación se encuentra estudiando actualmente los problemas con tanques que normalmente almacenan productos petroquímicos y silos, donde se almacenan granos. Según explica Godoy, tanto los tanques como los silos se construyen con una pared muy delgada, y bajo la acción de vientos, terremoto o por mal manejo, de pronto pueden cambiar su forma. En ese caso, ya no sirven.
Principalmente, los problemas de viento más grande en la Argentina se dan en la Patagonia, donde "hay tanques que tienen fallas de este tipo bastante graves", indica Godoy.

Distintos casos
"Recientemente colapsó un tanque que se estaba construyendo en la zona de Comodoro Rivadavia para almacenar petróleo. Restaba colocar el techo y colapsó por los vientos. Precisamente, estamos tratando de prevenir este tipo de fallas".
¿Cómo mejorar ese tipo de tanques? Godoy señala que investigan varios mecanismos para reforzar estas estructuras y mejorar su utilidad. Fundamentalmente, se hace a través de la colocación de estructuras menores que acompañan a la principal, y que evitan que se deteriore prematuramente. También se pueden añadir estructuras adicionales de soporte, para que tengan mejores condiciones de estabilidad.
En la provincia de Córdoba los problemas se dan en silos. "En un pueblo del sur de Córdoba, en el momento en que se inauguraban tres silos, los mismos fallaron. Hemos investigado ese tipo de fallas para comprender porqué ocurren estos casos particulares y extraer conclusiones generales que sirvan para una serie de casos", precisa el investigador. Algunos trabajos realizados por el grupo ya han sido publicados en revistas internacionales especializadas.

Formación de base
Desde el punto de vista práctico, estos estudios sirven para prevenir colapsos y daños de estructuras, para hacer que éstas sigan funcionando sin que tengan problemas de accidentes o roturas prematuras. Pero la importancia que este grupo da al tema no se basa solamente en su aplicaciones prácticas, sino también en que se lo considera determinante para la formación de sus miembros. "Muchas veces se estudia un problema que quizás no tenga una aplicación inmediata, pero al haber aprendido las distintos aspectos en torno a ese problema, se pueden exportar esos conocimientos a otros casos", explica Godoy. Y remarca: "Lo importante es que los jóvenes que trabajan con nosotros logren una buena formación en mecánica aplicada. Creemos que las aplicaciones pueden ir cambiando durante el tiempo, pero los fundamentos en los cuales se basa esta disciplina son los mismos que hace 30 años atrás".